"¿Todo tiene un final" o "todo lo bueno viene de tres en tres?”. Ambos refranes se aplican por igual a Guardianes de la Galaxia Vol. 3 de Marvel. Pero, ¿es realmente el final de todo para siempre? Marvel mantiene un perfil bajo y se ha decidido por la variante ´sí`, que no queremos anticipar a estas alturas y sobre la que la escena post-créditos revela más. Como siempre, no se trata de la secuela directa de Guardianes de la Galaxia Vol. 2, sino del largometraje número 32 del Universo cinematográfico Marvel, que aquí repasamos sin spoilers. Para tu propia preparación: la ha llegado a los cines el pasado 3 de mayo y deberías tener pañuelos a mano.
Durante un ataque a Knowhere por parte del poderoso Adam Warlock (Will Poulter), Rocket (Bradley Cooper) resulta gravemente herido. Detrás de todo está la Suma Sacerdotisa Soberana Ayesha (Elizabeth Debicki), que tiene cuentas pendientes con los Guardianes. El tiempo para salvar a su leal amigo juega en su contra. Mientras Peter (Chris Pratt), Drax (Dave Bautista) y sus amigos emprenden el viaje, poco a poco se va revelando lo trágico que es en realidad el pasado de Rocket. El mapache amante de las armas fue creado deliberadamente por el Alto Evolucionador (Chukwudi Iwuji).
Guardianes de la Galaxia Vol. 3 no lo tuvo fácil para ver la luz. Recordemos: en mayo de 2017, Marvel había echado a James Gunn debido a un tuit de hace diez años en el que hacía comentarios cuestionables sobre temas delicados, tras esto, DC tiró la caña de pescar y contrató al experto en cine de conjunto para su película correctiva El Escuadrón Suicida. Sin embargo, a principios de 2019, Disney y Gunn lograron llegar a un acuerdo para seguir trabajando juntos (con una tormenta de protestas de los fans respirándoles en la nuca), por lo que Gunn pudo continuar con su bebé. Aun así, la película tuvo que quedar aparcada en favor del proyecto de DC por el momento. Cuando llegó la pandemia la producción se fue retrasando cada vez más, para finalmente terminar con un inicio en la primavera de 2023.
Mientras tanto, ya habían surgido las primeras voces del reparto que mostraban su negativa a una continuación de su papel más allá de esta película, ya sea porque les apetecían otros papeles (Dave Bautista) o por lealtad a James Gunn (Zoe Saldaña), que abandonó el buque insignia de Marvel al mismo tiempo que esta película. Entonces, ¿significa esto una muerte de algunos personajes al mismo tiempo? ¿Pasará a mejor vida la mitad del reparto? Son dudas que de momento no podemos resolver, pero sobre las que internet lleva meses devanándose los sesos. Lo único que podemos revelar es que hubo bastantes lágrimas en el auditorio durante el pase de prensa. Pero, sobre todo, la marcha de Gunn es una amarga pérdida para el Universo cinematográfico Marvel.
Basándonos en sus declaraciones, no es ningún secreto que James Gunn tuvo total libertad artística sobre su última película del MCU y no tuvo que atarse a ninguna parte. En consecuencia, la tercera película parece completamente desvinculada de los acontecimientos de las fases 4 y 5 del UCM. Las referencias cruzadas son casi inexistentes y cuando se menciona el nombre de Thanos, eso ya es el mayor de los sentimientos. Por un lado, esto significa que aquellos que no sean cronólogos pueden ver la película por su cuenta sin tener que comprobar que su lista de comprobación está completa.
Pero, al mismo tiempo, también significa que el multiverso no da ningún paso adelante destacable en la segunda película de la fase 5. Algo que hay que apuntar a otro nivel. Esta película podría haberse ambientado con la misma facilidad en la fase 4, no importa. Al mismo tiempo, es difícil hablar de una trilogía de Guardianes de la Galaxia, porque Guardianes de la Galaxia Vol. 2 se hizo hace seis años y entre medias hay varias otras películas que tuvieron una gran influencia en los guardianes y su constelación. Dado que las dos primeras películas se centran en Star-Lord, Gamora y Nébula y que el especial de vacaciones de Guardianes de la Galaxia está dedicado a Drax y Mantis, el protagonismo recae ahora en Mapache Cohete. Groot sigue por aquí, por supuesto, pero mostró todo lo que se podía sacar del personaje en su serie de miniepisodios, I Am Groot.
Además, están todos los personajes secundarios que uno sigue asociando con los Guardianes, aunque a menudo solo se utilicen para los gags, como el perro espacial Cosmo, que parece aún más bizarro con la voz de Maria Bakalova. El único punto negativo (que sin duda no es insignificante para muchos aficionados al cómic) tiene que ver con la forma en que se trata a Adam Warlock, al que se representa como un personaje de broma, pero apenas ocupa espacio. Aunque aquí y allá tiene momentos para brillar, en general sigue siendo una presencia tibia, un extra para el UCM, pero no un enriquecimiento. Se une así a personajes como Hulkling, América Chávez y Cassie Lang, que ya existen pero a los que no se les ha permitido dejar huella hasta ahora.
Al igual que las dos primeras películas, la tercera se caracteriza por un especial corazón para los personajes y sus historias. Incluso cuando hay menos que aprender sobre alguien, Gunn se esmera en dar a todos suficiente diálogo y en incluir siempre a todos los presentes en cualquier interacción. A cambio, hay muchos momentos tranquilos que destacan más que los estallidos dominantes de acción y son, por tanto, las escenas que también se recuerdan. La trama es francamente insignificante: mediante la clásica historia de un viaje de A a B y a C, se llena el tiempo de duración. Amenaza, conflicto, solución. En el proceso, la historia de fondo de Rocket se cuenta a través de fragmentos, aunque tiene mucho que ofrecer e incluye varios momentos desgarradores. Esto es especial porque Rocket ya ha aparecido en varias películas, pero rara vez aportaba nada al núcleo emocional y más bien quedaba relegado a un segundo plano.
Aquí se da la vuelta por completo y es a través de este personaje como las amistades dentro del grupo se vuelven realmente transparentes. Algo que también tomó forma en el especial de vacaciones y que ahora se perfecciona. Si alguna vez nos emocionamos de verdad hasta las lágrimas en Marvel, siempre fue por muertes de personajes o finales tristes. No es el caso aquí, ya que las escenas desgarradoras están bien colocadas a lo largo del metraje. Hablando de eso, la estructura narrativa le quita al espectador la capacidad de evaluar hasta dónde ha avanzado realmente la película, y cuando el final llega de repente, no se nota en absoluto al principio, sólo para sorprender con la conclusión. Esto demuestra que lo más destacado no son necesariamente las escenas que hacen avanzar la historia, sino que se encuentran dispersas a cuentagotas por el camino.
En cuanto a la acción (que sigue siendo lo que atrae a muchos espectadores a las salas de cine), ocurre algo con regularidad y una secuencia en particular se queda grabada en la memoria. Sin embargo, no hay grandes momentos que merezcan ser recordados y que te hagan decir ´en Guardianes de la Galaxia Vol. 3..`" dentro de diez años. Son más bien los refinamientos escenificados los que resultan divertidos y el aspecto a veces bastante colorido cuando los guardianes aparecen con llamativos trajes espaciales. El diseño de producción recuerda a veces a los cómics de ciencia ficción de los años sesenta y setenta, que aquí se recogen de forma muy orgánica sin que parezcan deliberados. Con sus mundos y criaturas, Gunn vuelve a marcar la pauta y acerca una vez más el UCM a las acciones creativas de Star Wars. Algo fallida es la banda sonora, que no resulta tan icónica como en las dos primeras obras de Gunn, pero no deja de ser agradable que casi todas las canciones lleguen hasta el final.
Con una impresionante duración de dos horas y media, se trata de una de las películas del MCU más largas y épicas y, estas no se debe tanto al espectáculo de los efectos o a un enemigo casi invencible, sino más bien a la gran emotividad del material. Cuidado es el término que más justicia hace a todo ello. James Gunn trata sus temas con el máximo respeto y sentimiento y hace malabarismos con su conjunto de personajes como si fuera lo más fácil del mundo. Con gran atención al detalle, se ha creado una mezcla perfecta de música, acción, humor y grandes emociones.
Guardianes de la Galaxia Vol. 3 está un peldaño por encima de Guardianes de la Galaxia Vol. 2, pero los personajes se han acercado más a nuestros corazones y están más trabajados que muchos de los miembros de Los Vengadores. Esta película vuelve a encarrilar el MCU y, al mismo tiempo, muestra la gran diferencia cualitativa con producciones como Ant-Man y la avispa: Quantumania. Una futura favorita de los fans junto a las películas de la Fase 3 de Los Vengadores y Spider-Man: No Way Home.
