La llamada vuelve a sonar
En 2022, The Black Phone se convirtió en una de las sorpresas más destacadas del cine de terror contemporáneo. Dirigida por Scott Derrickson y basada en un relato corto de Joe Hill, la película combinó una narrativa tensa con una atmósfera sobrenatural bien calibrada, recaudando más de 160 millones de dólares a nivel mundial. Ahora, su secuela oficial presenta su primer tráiler… y las expectativas están más altas que nunca.
Black Phone 2 promete una expansión emocional y aterradora del universo original, apostando por un tono más íntimo y familiar, sin renunciar al terror psicológico que definió la primera entrega.
La historia: la muerte no ha detenido al verdadero mal
Han pasado cuatro años desde que Finn (Mason Thames), entonces de 13 años, logró escapar del sádico asesino conocido como The Grabber, interpretado con inquietante intensidad por Ethan Hawke. Su hazaña lo convirtió en el único sobreviviente, pero también dejó marcas invisibles en su vida.
En Black Phone 2, Finn ahora tiene 17 años y sigue lidiando con el trauma de su pasado. Sin embargo, el verdadero protagonista del tráiler es el regreso espectral de The Grabber, quien esta vez apunta a Gwen (Madeleine McGraw), la hermana menor de Finn, como nuevo blanco de su venganza.
El tráiler sugiere que The Grabber ha adquirido un nuevo tipo de poder desde el más allá, volviéndose aún más amenazante. Gwen, ahora con 15 años, comienza a recibir llamadas en sueños a través del misterioso teléfono negro y visiones inquietantes de tres niños siendo acechados en un campamento invernal conocido como Alpine Lake.
De la supervivencia al enfrentamiento
Lo más interesante del planteamiento de Black Phone 2 es su viraje hacia una estructura de doble protagonista. Gwen no es solo una víctima en potencia: es una figura activa, decidida a descifrar el nuevo ciclo de horrores que afecta a su familia. El tráiler establece una tensión creciente entre el pasado y el presente, la realidad y lo sobrenatural, y la culpa heredada frente al instinto de protección.
La narrativa apunta a un viaje que va más allá del miedo, con la revelación de que The Grabber no solo sigue presente, sino que tiene un vínculo más profundo y personal con la historia familiar de los hermanos.
Ethan Hawke: el regreso de un villano inolvidable
Ethan Hawke retoma lo que ya se ha convertido en uno de los roles más siniestros de su carrera: The Grabber. Su actuación en la primera entrega fue inquietante sin caer en clichés, y su regreso en esta secuela desde el más allá le añade una dimensión todavía más perturbadora. El tráiler juega con imágenes fantasmales y recursos visuales que evocan el cine de terror clásico con un giro contemporáneo.
Este regreso espiritual —más simbólico que físico— podría posicionar a The Grabber como uno de los íconos modernos del cine de horror, en la línea de antagonistas como Freddy Krueger o Pennywise, pero desde una perspectiva más realista y psicológica.
Un reparto que amplía el universo
Además del regreso de Mason Thames y Madeleine McGraw, el elenco de Black Phone 2 incorpora nuevas figuras que enriquecen el universo de la historia. Destaca la participación del actor nominado al Oscar Demián Bichir, quien interpreta al supervisor del campamento donde ocurren los nuevos eventos paranormales. Su presencia añade peso dramático al relato y sugiere un trasfondo moral o institucional detrás del misterio.
A él se suman Arianna Rivas, Miguel Mora, y Jeremy Davies —quien regresa como el padre de Finn y Gwen— en una narrativa que ahora también explora la figura paterna como eje emocional y posiblemente como parte del conflicto con The Grabber. Todo indica que el nuevo elenco ayudará a conectar las piezas del pasado con la amenaza actual.
La visión de Scott Derrickson: horror con conciencia emocional
Derrickson, quien ya demostró su capacidad para mezclar atmósfera, ritmo y profundidad emocional en The Exorcism of Emily Rose y Sinister, regresa como director y guionista junto a C. Robert Cargill. La pareja creativa parece decidida a no repetir simplemente la fórmula de The Black Phone, sino a ampliarla hacia nuevos terrenos temáticos: la pérdida, la culpa heredada, los lazos familiares y el poder del trauma.