En un futuro, la superpoblación mundial llevó a la humanidad al borde del abismo. Ni el espacio ni la comida son suficientes, por lo tanto se crea la política radical de solo tener un niño por familia. Dicha ley es protegida por el escuadrón llamado Child Allocation Bureau. Cuando un segundo niño nace de una madre, Nicolette Cayman (Glenn Close) lo toma y lo hace pasar por un proceso de criogenización, con el propósito de congelar a ese ser humano para un futuro y así poder darle una mejor calidad de vida. Terrence Settman (Willem Dafoe) tiene una tarea particularmente titánica. Su hija dio a luz a septillizas y murió en el lecho de parto. Es por eso que desarrolla un sistema para que las demás seis no sean atrapadas por el gobierno y enviadas al mencionado proceso, otorgándoles a cada una un nombre de día se semana, el cual servirá para que cada una salga al exterior y se relacione. Treinta años más tarde, Lunes, Martes, Miércoles, Jueves, Viernes, Sábado y Domingo (todas interpretadas por Noomi Rapace) comparten el nombre Karen Settman. Cada una de las hermanas puede pasar un día a la semana en público, mientras que los demás deben permanecer en su pequeña casa. El sistema funciona hasta que Lunes un día ya no vuelve a casa.
El director noruego Tommy Wirkola hizo un nombre para sí mismo en 2009 con la saga de películas de terror "Dead Snow", en el que seres humanos luchaban con zombies nazis. Suena descabellado, pero la primera entrega es sumamente divertida. En 2013, hizo el salto a la escena internacional con la adaptación del cuento de hadas “Hansel and Gretel: Witch Hunters” con Jeremy Renner y Gemma Arterton. Cualquiera que haya visto estas películas, debe saber que este último trabajo es sólo moderadamente aceptable.
En un mundo futurista, donde la historia trata del problema de la superpoblación y se centra en la vida absolutamente inusual de las siete hermanas, se nos desmorona a pedazos la interesante premisa, algo opuesto a la obra maestra de Alfonso Cuaron “Children of Men”. Después de algún tiempo desarrollado, la historia en su tercer acto toma un giro inesperado, de ser una visión futurista se torna en una película de acción con toques de venganza, llenando estos minutos con mártires y muy buenas secuencias de acción. Ciertas similitudes con la serie de televisión canadiense "Orphan Black" son obvias.
La película se desarrolla entre dos tonos, por un lado es sombría y dura, en el otro lado es graciosa y algo colorida, pero por momentos encuentra una media agradable. Sin lugar a dudas, la estrella y lo más importante de toda esta producción es Noomi Rapace. La actriz logra llenar siete personajes muy diferentes, y las interacciones de ella con los secundarios son tan poderosas que prácticamente proporcionan el solo entretenimiento. Willem Dafoe, como el abuelo y “entrenador” de las chicas, está más que correcto, pero no menos importante es Glenn Close, quien presenta a una oponente dura y sin piedad, pero con motivos comprensibles.
El filme también pudo haber utilizado el pasar un poco más de tiempo con las hermanas como una unidad y mostrar a la audiencia más de cómo se entrenaron. El guión de Max Botkin y Kerry Williamson (Alex Cross) nos da poca información para sentirnos en tacto con los personajes antes de que todo se vaya desmoronando, con un poco mas de inversión emocional, la película tuviera un tono diferente.
El thriller de ciencia ficción de Tommy Wirkola tiene una idea intrigante, sin embargo, la historia se siente con un poco de prisa, y hay poco tiempo para explorar a las hermanas y a su entorno. La película maneja bien los aspectos técnicos (de tener múltiples personajes interactuando en pantalla), el equipo de diseño de peinados y maquillaje efectivamente creó los personajes. El valor del diseño de arte es también apreciado. La película funciona como entretenimiento pero navega en lo común gracias a su empeño de enfocarse en la acción y no es su interesante trasfondo.