Una película clásica no la crea un director, sino la audiencia.
Aunque un realizador esté convencido de que tiene en sus manos un guión impactante, al mejor director de fotografía que pudo conseguir, al mismo Hans Zimmer para realizar el score y a los actores más relevantes de la actualidad, nunca estará completamente seguro de que su obra será recordada por los espectadores y que la seguirán comentando en los años venideros. Un clásico se crea por los cientos de críticas que se escriben sobre él, incluso años después de ser lanzado. Es aquel que mantiene a la gente hablando por la forma magistral en la que presenta una historia y juega con la idea preconcebida del cine.
“Se7en” de David Fincher inspiró decenas de referencias en la cultura pop a los pocos años de que fue lanzada y, cuando se habla de la carrera de Kevin Spacey, Brad Pitt, Morgan Freeman y del mismo director, es considerada una de sus mejores obras. La crítica aún la ve como un filme que cambió el cine de detectives para siempre, afirmando que pasará un largo tiempo antes de que alguien cree una historia tan relevante y memorable como esa obra maestra. Es un clásico instantáneo.
En años más recientes, “The Social Network”, también de Fincher, hoy es considerada un clásico contemporáneo. Aunque fue menospreciada durante su lanzamiento –hace apenas siete años– hoy es vista como un digno ejemplo del cine moderno y de cómo –utilizando recursos que existen desde hace más de 80 años– puede crearse una obra maestra. La cinta fue llamada «el “Citizen Kane” del siglo XXI» no sólo por su historia, sino porque su composición general hablaba sobre una época, las personalidades que la habitan y la importancia de los conflictos entre personas cercanas a nuestra generación. Las críticas y los comentarios sobre el filme durarán décadas hasta que se consolide como una de las obras más grandes de todos los tiempos.
Podríamos pasar un largo tiempo repasando estos nuevos clásicos traídos por Fincher, Danny Boyle, Christopher Nolan y hasta Yorgos Lanthimos, pero vale la pena repasar algunos de los más grandes clásicos de la historia del cine que siguen siendo comentados y que la audiencia nunca olvidará.
Divididos por décadas (y disponibles en Netflix para disfrutarlos de forma inmediata) te hablamos sobre cada una de las etapas del cine y de su relevancia en la constante evolución del cinema:
≡≡≡≡≡1920-1930-1940≡≡≡≡≡
Los filmes de estas décadas fueron los primeros en popularizarse y llevarse a las masas. Durante estos años se llevó un constante proceso de prueba en el que las personas aún trataban de averiguar qué era el cine y cómo podían perfeccionarlo. Orson Welles revolucionó la forma de ver el cine con su obra maestra “Citizen Kane”, la cual utilizaba los recursos popularizados por los Lumiere, por Georges Méliès y por Charles Chaplin, pero integrados con nuevos elementos visuales que servían para contar una historia de manera no lineal, causando un impacto mayor en la audiencia. El cine de este tipo demostró que las películas podían ser un simple drama teatral o una serie de secuencias experimentales, siempre y cuando fascinaran a la audiencia y la invitaran a imaginar nuevos escenarios.
Los títulos que ofrece Netflix de estas décadas son muy reducidos pero son ejemplos claros de cómo en ese entonces, se pretendía experimentar y contar historias relevantes que sirvieran para que las personas apreciaran otros panoramas del mundo. “Let There Be Light” es la mejor de sus opciones, especialmente porque es uno de los documentales antiguos más relevantes, mismo que habla sobre la guerra y sus efectos en los soldados. La cinta fue una fuerte crítica hacia las políticas militares que se desarrollaron a lo largo de la Segunda Guerra Mundial y continúa siendo un crudo registro de la realidad que vivieron miles de combatientes norteamericanos.
“The Daughter of Dawn” (1920)
Norbert Myles
“Let There Be Light” (1946)
John Huston
“Thunderbolt” (1947)
William Wyler & John Sturges
“San Pietro” (1945)
John Huston
≡≡≡≡≡1950≡≡≡≡≡
Indudablemente Alfred Hitchcock definió ésta década (y el cine para siempre). El cine de los 50 (considerado oficialmente el arte de la postguerra) ya no se tenía que preocupar por mostrar elementos positivos ni historias felices para mantener tranquilas a las audiencias alrededor del mundo. Esa separación permitió que el arte evolucionara teniendo pequeñas revoluciones. Es decir, primero la música se abandonó de la tradición de jazz y comenzó a imitar las antiguas orquestas europeas, después la fotografía cambió, tomando elementos de los dibujos animados y del arte surrealista para crear nuevas emociones, y directores como Hitchcock, Truffaut y Luis Buñuel se encargaron de implementarlos con historias revolucionarias que mezclaban géneros, que jugaban con la audiencia y que probaban que el cine nunca iba a estar definido, sino que iba a ser un arte siempre cambiante.
De entre las cintas en Netflix, en definitiva las de Hitchcock son un must-see para cualquier fanático del cine y de las historias interesantes, asimismo, ambas revelan la naturaleza de las películas dentro de sus historias. “Rear Window” y “Vertigo” son ejemplos perfectos que demuestran que los filmes pueden lidiar con diferentes géneros, integrar la vida y mostrar misterios intensos inolvidables si todos los elementos están situados a la perfección. La misma obsesión de Hitchcock para crear las imágenes ideales es digna de ser alabada y apreciada en cada escena.
“Rear Window” (1954)
Alfred Hitchcock
“The Vampire’s Coffin” (1958)
Fernando Méndez
“Vertigo” (1958)
Alfred Hitchcock
≡≡≡≡≡1960≡≡≡≡≡
Comenzamos con la verdadera revolución audiovisual. Una vez que el cine en los 60 se convirtió en una forma más accesible para cualquier aspirante a realizador, las películas comenzaron a cambiar de una manera insólita. Filmes con fotografía excepcional acompañadas de diálogos astutos y escenas legendarias comenzaron a aparecer en todos los países. Mientras que Kubrick dominaba Inglaterra y comenzaba a absorber todo su conocimiento; en Francia Jean-Luc Godard lideraba la nouvelle vague, que definiría la estética en el cine; y en Estados Unidos autores como Blake Edwards y un novato Peter Fonda comenzaban a definir el cine experimental de drogas de la época (el cual aún vive hasta la fecha). La mezcla cultural que se desarrollaba en todo el mundo derivó en algunos de los trabajos más importantes de la década como “Easy Rider” o “2001: Odisea en el Espacio”, joyas que estamos lejos de olvidar.
En el servicio de transmisión existe una excelente selección que justamente pasa por Kubrick y Edwards, con algunas opciones que todos deben ver como “To Kill a Mockingbird”, la adaptación de una de las novelas más importantes de inicio de siglo. Asimismo, “Breakfast at Tiffany’s” sintetiza el espíritu de Truman Capote, su autor original, y “Dr. Strangelove” es el mejor ejemplo de una comedia negra con comentario político, que incluso 50 años después, sigue siendo relevante.
“Psycho” (1960)
Alfred Hitchcock
“Breakfast at Tiffany’s” (1961)
Blake Edwards
“To Kill A Mockingbird” (1962)
Robert Mulligan
“Dr. Strangelove or How I Learned to Love the Bomb” (1964)
Stanley Kubrick
“Funny Girl” (1968)
William Wyler
≡≡≡≡≡1970≡≡≡≡≡
Aunque el cine de los 60 es considerado de los mejores de la historia, los 70 presentaron una ola de directores norteamericanos que lograron implementar en sus creaciones la influencia del cine asiático y europeo para darle a las audiencias trabajos más profundos que integraron elementos dramáticos más experimentales como las historias no lineales y los dramas enfocados en criminales. Por primera vez los héroes no eran limpios, sino corruptos, criminales, enfermos y sangrientos, sin embargo, eso no significaba que las historias fueran violentas, sino que revelaban más de la naturaleza humana; su decadencia, pesadillas y sus más horrendos sueños.
Cada una de las cintas clásicas de esta década que están disponibles en la plataforma entregarán algo a quien las vea y mostrarán que el cine va más allá de las risas y las lágrimas y que en realidad sirve para mirar la vida por otra perspectiva. “Patton” habla sobre guerra y lenguaje, “Mean Streets” sobre la vida en los barrios bajos, “The Godfather II” sobre la evolución de una familia en una nación corrupta y “One Flew Over the Cukoo’s Nest” da un claro vistazo hacia los miedos más temibles que tienen las personas; entre ellas, la locura.
“Patton” (1970)
Franklin J. Schaffner
“THX 1138” (1971)
George Lucas
““The Godfather Part II” (1974)
Francis Ford Coppola
“Jaws” (1975)
Steven Spielberg
“One Flew Over the Cuckoo’s Nest” (1975)
Milos Forman
“The Rocky Horror Picture Show” (1975)
Jim Sharman
“Taxi Driver” (1976)
Martin Scorsese
“Escape From Alcatraz” (1979)
Don Siegel
≡≡≡≡≡1980≡≡≡≡≡
…Y llegamos a la última década de los clásicos “antiguos”. Es justo detener aquí la línea de los filmes que todos deben ver, pues en los 90 las producciones independientes comenzaron a ser aclamadas por la crítica y el juego del cine cambió por completo. Antes de eso, en los 80, llegaba la última ola de los grandes realizadores de Hollywood, quienes evolucionaron una vez más enfocándose en grandes obras de la ciencia ficción y en dramas que ya no tenían a los clásicos “señores” como protagonistas, sino a jóvenes adolescentes con problemas existenciales y a excéntricos protagonistas enfrentándose a la realidad que les fue heredada por los baby boomers y los responsables del cine de los 60.
La selección que está en Netflix es perfecta para cualquier fanático, desde “Indiana Jones” hasta “Scarface” o “Do The Right Thing” de Spike Lee, el primer director en mostrar el verdadero rostro de la comunidad negra en Estados Unidos. Además de eso, tienen algunas de las mejores comedias de la década dirigidas por John Hughes, que definieron las películas indie románticas que tanto amamos en la actualidad.
“Indiana Jones and the Raiders of the Lost Ark” (1981)
Steven Spielberg
“Annie” (1982)
John Huston
“Sophie’s Choice” (1982)
Alan J. Pakula
“Gandhi” (1982)
Richard Attenborough
“Scarface” (1983)
Brian De Palma
“The King of Comedy” (1983)
Martin Scorsese
“Once Upon a Time in America” (1984)
Sergio Leone
“Amadeus” (1984)
Milos Forman
“Brazil” (1985)
Terry Gilliam
“The Breakfast Club” (1985)
John Hughes
“Ferris Bueller’s Day Off” (1986)
John Hughes
“Wall Street” (1987)
Oliver Stone
“Sex, Lies and Videotape” (1989)
Steven Soderbergh
“Do The Right Thing” (1989)
Spike Lee
“Steel Magnolias” (1989)
Herbert Ross
Fuente: Cultura Colectiva