Pocos tienen en mente la evolución de la televisión cuando la observan, pero seguramente algunos no pudieron evitar hacerlo cuando llegó el final de temporada en Game of Thrones, uno de los mejores de la historia. Es increíble considerar que hace apenas 50 años la imagen a color apenas y llegaba a los dispositivos y las temáticas que trataban los programas eran inocentes, llenos de acción sencilla y actuaciones, música y diseño un poco débiles, dependiendo la inversión de la producción. Ahora, podemos ver en alta definición y con gran detalle a una enorme flota ficticia cruzando un océano imaginario mientras tres dragones vuelan por encima y la explosión del centro de una ciudad que no existe. Todo parece real y el efecto que causa es igual o más fuerte de lo que se vio hace menos de medio siglo.
2016 en la televisión ha sido señalado como uno de los mejores años a pesar de haber perdido grandes como “Breaking Bad” y “Mad Men” en años anteriores. Los nuevos ciclos traen nuevos programas o actualizaciones excelentes de algunos que continúan en el aire. Ya fueron lanzadas algunas listas de los mejores episodios, pero Rolling Stone creó la suya de las series que marcaron estos 12 meses por su mérito artístico o por continuar cambiando la T.V. como se ha hecho desde sus orígenes.
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“High Maintenance”
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“Lady Dynamite”
El surrealismo extremo de Lady Dynamite le permite contar tres historias a la vez: Su pasado normal, su quiebre y su presente. Maria Bramford protagoniza en una versión diferente de ella, con su misma condición psiquiátrica: bipolaridad II. La historia cuenta cómo Hollywood y el mundo del espectáculo pueden destruir la mente. La serie es principalmente sátira y sus momentos de honestidad han hecho que nos mantengamos en espera de la siguiente temporada.
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“You’re the Worst”
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“Horace and Pete”
Louie C.K. sorprendió al mundo haciendo un lanzamiento inesperado similar a Beyoncé. “Horace and Pete” llegó de sorpresa a Internet con sólo 10 episodios y trata los dueños de un local. Coprotagonizada por Steve Buscemi, la serie –como gran parte del trabajo de C.K.– incluye hilarante comedia contrastada por un melodrama serio que trata de profundizar en las distintas capas que atormentan la mente de una persona. Su estatus de clase media y vida “normal” reflejan que el drama no sólo llega como lo vemos en las películas.
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“Broad City”
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“Veep”
“Veep” llegó a su quinta temporada este año y la crítica afirma que no ha bajado su alta calidad que le ha valido distintos premios Emmy. Julia Louie Dreyfuss personifica a la presidente de Estados Unidos y Armando Iannucci hace una fuerte sátira de la política y cómo funcionan las oficinas de gobierno, que constantemente viven bajo el pánico de causar descontento entre los votantes. La serie deja un excelente legado que algunos trabajos contemporáneos han tratado de replicar.
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“Fleabag”
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“Game of Thrones”
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“Transparent”
Jeffrey Tambor ha ganado dos Emmys y un Golden Globe por su papel en este emotivo trabajo que habla sobre los problemas de un hombre que, después de retirarse como profesor de Ciencias Políticas, decide confesarle a su familia que se identifica como una mujer. La historia –que ha servido para crear una mejor imagen de la comunidad transgénero– es completamente desgarradora y rompe los paradigmas al mostrar las consecuencias dentro de la familia y cómo una persona viviendo demasiado tiempo oculta puede tener dificultades para ser ella misma.
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“Better Things”
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“Difficult People”
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“Last Week Tonight With John Oliver”
John Oliver, como excelente discípulo de Jon Stewart, tomó el programa de su mentor y sin destruirlo completamente, dio un giro que llevó el concepto de dar las noticias con sátira a otro nivel por completo. Oliver le dedica 20 minutos de programa a una problemática en particular que él y su equipo de investigadores decidieron tratar. Con chistes, sketches y plática seria, el presentador informa de verdaderos problemas, comienza un diálogo y motiva a los espectadores a no quedarse callados y a que interactúen con el gobierno del que tanto se quejan.
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“Orange is the New Black”
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“The Americans”
“The Americans” resultó algo similar a un sleeper hit. Aunque su premisa desde el inicio es cautivadora, no fue sino hasta su tercera temporada que la crítica inmediatamente la posicionó en las listas de las mejores series de todos los tiempos. Bajo el contexto de la guerra fría, una pareja de espías trabaja para el gobierno ruso mientras trata de decidir si quiere que sus hijos sean entrenados como soldados comunistas. Los temas morales de la guerra y la muerte son tratados con crudeza y muestra que el peligro jamás se detiene cuando se vive en escondite.
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“Full Frontal with Samantha Bee”
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“Black Mirror”
Una de las series que más ha causado sensación este último par de años por exponer los riesgos de la nueva era tecnológica, además de los avances emocionales de los seres humanos es “Black Mirror”. Cada historia trata un tema diferente, es que cada uno tiene inmerso un nivel de detalle que nos recuerda por qué la televisión británica es de las mejores en el mundo. El guión, las actuaciones, música y diseño están perfectamente sincronizados para afectar al espectador.
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“Stranger Things”
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“The People v. O.J. Simpson”
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“Atlanta”
Donald Glover es uno de los creadores definitivos de este año. Actor, comediante de stand up, escritor y músico bajo el nombre Childish Gambino, creó este programa (que él mismo protagoniza) sobre dos primos raperos que pasan el tiempo en distintos lados de Atlanta, Georgia, tratando de ganar reconocimiento y mejorar sus vidas y las de sus familias. El viaje que ambos personajes pasan toca temas como la ambición, el deseo, la traición y el egoísmo dentro de una era moderna y cómo la moral puede distorsionarse siempre y cuando alguien considerado “bueno” salga beneficiado.
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En el pasado solíamos imaginar que en algún punto llegaría la T.V. de alta calidad, pero ahora que está aquí es difícil saber cuál será su futuro. Si la imagen cambia, la industria también tendrá que hacerlo, ésa es su área de experiencia.
Este año nos mostró todos los lados que puede tomar una obra de una hora o menos de duración para cambiar nuestra vida con unas palabras, canción o un simple momento que nos haga exhalar y decir “demonios, vaya que vivimos en un buen momento”.
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Fuente: RollingStone por Rob Sheffield