Queen of Katwe es una película que resalta el triunfo de la mente de una persona en un lugar en el mundo que, por lo general, no da crédito por el dominio intelectual. La persona real es una niña, el lugar está en el este de África, y su cerebro es una bóveda de estrategias, una destreza que cualquier colonialista hubiera deseado poseer: ser un maestro en el juego de ajedrez.
La niña de diez años es Phiona Mutesi (Medina Nalwanga). Phiona no sabe leer, mucho menos escribir su nombre, la educación no es una prioridad para ella o su familia, ya que la real lucha consiste en mantenerse con vida en el barrio llamado Katwe en la capital de Uganda, Kampala. Su madre Nakku Harriet (Lupita Nyong'o), trabajadora y cuasi fanática religiosa, está desesperada por mantener a sus 4 hijos cerca de ella, ya que en tiempo reciente había perdido a su esposo y a una de sus hijas.
Mientras que su hija mayor Night (Taryn "Kay" Kyaze) está comenzado a enamorarse, no es la ayuda que necesita Phiona y su hermano Brian (Martin Kabanza) para transportar el agua hacia la casa y salir a vender maíz hervido en medio de la multitud en que Katwe se desarrolla día a día. Entre tantas situaciones que vemos en pantalla, una sucesión de tragedias acompañados de bocanadas de aire fresco, la película va tomando forma, todo esto desde la primera secuencia.
La directora Mira Nair empuja a la audiencia a sentir empatía con la familia. Aunque la plataforma es deprimente, ella se las arregla para llenar de colores, música y acción el triste escenario. Sean Bobbitt (12 Years as slave, Shame, Hunger) utiliza la cámara para hacernos sentir como un observador del desarrollo que los personajes van presentando, y de cómo estos, con miradas y gestos descubren lo que les gusta o desagrada. Utiliza sabiamente la luz natural, y durante las noches, se enfoca solamente en las acciones de los personajes y sus vestuarios .
Robert Katende (David Oyelowo) amante del soccer y el ajedrez, entrena a los niños de manera semanal en un pobre e improvisado local, allí les enseña las estrategias y reglas del ajedrez y también les da de comer mientras aprenden las estrategias y lección del día. Un buen día, Phiona se asoma tímidamente al local y es allí cuando ella descubre una habilidad que desconocía. Poco a poco, Phiona desarrolla de forma natural habilidades para crear hasta 8 movimientos antes de que su contrincante juegue, esta habilidad viene con doble filo, ¿Cómo un niño que no tiene nada, de repente se ve con tanto poder?
Como algunas de las mejores películas de deportes, su equipo es el más débil, los niños pobres se logran meter un torneo en contra de los niños arrogantes de escuelas privadas. No es cuestión de raza, pero si de clase social. Es aquí donde tal vez peca la película, pues se apega tanto a la formula Disney, que con falsas esperanzas quedamos esperando que la traicione, o que al menos la varíe, pero no, al parecer, los estatutos de las historias con dicho sello, no tienen la potestad de cambiar, o al menos de contar algo diferente. No es necesario ser un experto para saber qué pasará, y presenciar cómo nuestros héroes de una forma segura, pero con vicisitudes, lograrán el olimpo, y no es que esté mal, sino que es aburrido y monótono ya saber lo que les depara. Sabemos que está basado en hechos reales, pero el detalle está en cómo se cuenta, no en la historia en sí. "Queen of Katwe", es un producto bueno, enfocado a la familia, con una muy buena dirección de Mira Nair, una estupenda fotografía, y una Lupita Nyongo extraordinaria.