La primera cita es el momento decisivo para que una relación triunfe o no. Estás dispuesto a conocer a la otra persona y darte cuenta si en verdad es para ti o sólo se trataba de atracción física. Existen errores y aciertos que todos cometemos en ese momento, mismos que podrían definir el rumbo de nuestro amorío.
A veces esperamos la llamada de la que será la segunda cita y no entendemos qué pasó o por qué esa persona ha cambiado tan drásticamente de opinión si a nuestro parecer lo hicimos todo bien. Nos pasamos horas pensando en lo que hicimos mal, qué tema mencionamos que no le gustó, nuestro defecto más íntimo del que se dio cuenta o la plática incómoda que sin querer trajimos a colación.
Pero tal vez algo más lo asustó. Algo que no nos involucra directamente y que pudimos arreglar en tan sólo unos instantes y fijarnos en los detalles, porque lo importante no era la manera en la que te acercabas y lo mirabas fijamente a los ojos sino simplemente aquello en lo que no pusiste atención.
Tal vez la elección de película influyó, porque hay personas que se identifican demasiado con los roles de una cinta. ¿Qué hubiera pasado si nuestra elección hubiera sido otra? Tal vez estaríamos con esa persona que nos gustaba tanto en este momento, nuestra vida sería otra, una mucho mejor por no haber escogido ese filme para la primera vez que salíamos.
Te presentamos algunas cintas que sin duda deberías olvidar para la primera cita.
Antichrist, Lars von Trier
(2009)
La muerte de su pequeño mientras ellos hacían el amor se convierte en un momento tan traumático que todo se convierte en una pérdida infinita de la cercanía y racionalidad de una pareja. Para intentar arreglar las cosas van a una casa en medio del bosque pero todo empeora. Ella, con un severo problema de personalidad, depresión y locura, intenta matar a quien un día fue su compañero de vida.
Él, Luis Buñuel
(1953)
En la misa de Jueves Santo, Francisco conoce a Gloria y sin importar que sea la prometida de su mejor amigo, comienza a conquistarla. Pero esa relación que parece salida de un cuento de hadas, paulatinamente se convierte en un amor enfermizo lleno de celos, ira y castigos que involucran la tortura física y psicológica.
Gone girl, David Fincher
(2014)
Un thriller psicológico que se vuelve adictivo por la manera en la que está narrado, en el que se cuenta la desaparición de una mujer que marca el inicio de un misterio tan grande. Como espectadores somos testigos del lado más oscuro del matrimonio, los engaños, las decepciones y el miedo, en el que los celos, la venganza y la locura toman un papel indispensable para que todo termine mal.
Made of Honor, Paul Weiland
(2008)
Una chickflick que cuenta la vida romántica de un joven que piensa que enamorarse es para tontos hasta que su mejor amiga se compromete y se da cuenta que está perdiendo al amor de su vida. El problema es que todas con las que sale se vuelven reemplazables y sin importancia, y si no quieres dudar de su fidelidad y la relación con su mejor amiga o amigo, mejor no la veas.
500 days of summer, Marc Webb
(2009)
La historia de desamor que la mayoría hemos visto, en donde un chico, llamado Tom, perdidamente enamorado de la chica nueva de la oficina, Summer, no logra conquistarla por más que lo intenta. Todo parece que transcurre con tranquilidad, ellos simulan tener el inicio de lo que será una bella historia romántica, pero Summer no tiene planeado el mismo destino, no ve en él a su pareja ideal.
Blue valentine, Derek Cianfrance
(2010)
Después de siete años juntos, el matrimonio de Dean y Cindy, interpretados por Ryan Gosling y Michelle Williams, pasa por un bache sin remedio que parece no tener fin. En un intento por recuperar su relación, Dean busca una aventura en un hotel temático pero al parecer ya nada tiene remedio. Entre recuerdos podemos ver su entorpecida relación siempre conflictiva y triste.
Candy, Neil Armfield
(2006)
El amor a veces nos destruye sin darnos cuenta, por más que nos aferremos a él. En esta película, el amor entre Candy y Dan es tan adictivo como la heroína. Viven entre un mundo de drogas que parece nunca dejarlos seguir adelante y por más amor que sientan el uno por el otro y la apasionante e idílica relación que tienen, saben que todo está perdido, porque juntos no podrán escapar de las drogas.
Closer, Mike Nichols
(2005)
La infidelidad de los protagonistas no harán que quieras verla con aquella persona a la que deseas conquistar. Un vistazo a las relaciones modernas, llenas de intimidad y triángulos amorosos. Una fotógrafa (Julia Roberts), un periodista (Jude Law), un médico (Clive Owen) y una camarera (Natalie Portman), tienen idilios amorosos y encuentros sexuales ocasionales que más que acompañarlos los convierten en seres más solitarios y llenos de traiciones destructivas.
All Good Things, Andrew Jarecki
(2010)
Situada en los años 70, cuenta la historia del hijo de un magnate de bienes raíces que se enamora de una joven de clase media. Comienzan una relación y todo parece salido de un cuento de hadas. Ella estudia medicina y lidia con los cambios de ánimo de su pareja. Se casan y pronto las cosas empeoran, llevando su control y violencia a un nuevo nivel en el que ni siquiera la deja ver a su familia.
Revolutionary road, Sam Mendes
(2008)
En esta cinta que retrata los años 50 en Estados Unidos, cuenta la historia de una pareja de Connecticut que tiene aspiraciones muy diferentes al resto. Ella sueña con viajar a París y adoptar el mundo bohemio y artístico del lugar, un anhelo que él también compartía en su juventud. Él, agobiado por un empleo que no le gusta y apenas superando los 30, se cuestiona su existencia y lo que ha logrado con ella. Mientras buscan alcanzar sus sueños, poco a poco, su relación es más débil y problemática. Pronto se darán cuenta que su relación y el amor no es suficiente para ser felices.
Fuente: Cultura Colectiva