Ganadora del último Oscar a la Mejor Película (junto a otras tres estatuillas, incluida la de Mejor Director), 'Birdman' fue uno de los grandes hitos cinematográficos de la pasada temporada, especialmente por la maestría escénica mostrada por Alejandro González Iñárritu en su decisión de presentar toda la película como si estuviese filmada en un único plano, sin cortes. Aunque resultaba evidente que estos existían (por ejemplo, en aquellas escenas en que pasábamos de la noche al día), no es nada sencillo localizar los puntos en que el director mexicano aprovechó para cortar el plano.
, considerada la primera película narrada (que no rodada) en un único plano secuencia. Hitchcock no hubiese podido, de hecho, filmar toda la película en un único plano sin cortes porque en 1948 los rollos de celuloide sólo podían registrar 10 minutos de metraje del tirón. Así que el maestro del suspense aproximaba cada cierto tiempo la cámara a un punto oscuro de la escena (la americana de uno de los personajes, por ejemplo), para fundir la imagen a negro y cambiar en ese momento la película.
En 'Birdman', Iñárritu no se encontró con este problema, aunque es obvio que los cortes son más numerosos y también mucho menos evidentes. El vídeo de 'The Film Theorists' analiza cómo el director utilizó un desenfoque, o una imagen más oscura, para cortar el plano. E identifica al menos un corte en la célebre escena en la que Michael Keaton se pasea semidesnudo por Times Square.
No es de extrañar que Emmanuel Lubezki se llevase por 'Birdman' el Oscar a la Mejor Fotografía. Lo que sí resulta más extraño es que la Academia no reconociese, ni siquiera con una nominación, la labor en la sala de edición de los montadores Douglas Crise y Stephen Mirrion.