La historia de Andy Weir, autor de “The Martian”, es digna de publicar. Andy es un programador de computadoras ‘’freelance’’ que, además de la programación, compartía una pasión, escribir. Es así que un buen día inicia la publicación de su primera novela, en la cual narraba las peripecias de Mark Wihitney, un astronauta olvidado en Marte. Luego de un accidente, dicho astronauta no murió y tuvo que ingeniárselas para mantenerse con vida en un planeta desconocido y muy poco hospitalario.
Andy, publicaba los capítulos en su blog personal, de manera gratuita y con muy pocos lectores. Un buen día, cuando ya la novela estaba terminada y publicada en su totalidad, alguien le recomienda que la publique en Amazon. Este sigue dicho consejo y la pública por la suma de 99 centavos (de dólar) en dicho portal. “The Martian” en menos de un año se convierte en un best-seller, con 180,000 copias vendidas en 6 meses. Es de esperar que le lleguen ofertas para adaptaciones cinematográficas y derechos de editoriales.
Con fuertes influencias de Arthur C. Clarke e Isaac Asimov, Weir logra ambientar las peripecias de este Robinson Crusoe del espacio.
Para su adaptación cinematográfica se contrató a uno de los mejores directores del tema, Ridley Scott fue el elegido para contar dicha aventura y no pudo se mejor elección. Scott ha más que comprobado su talento detrás de las cámaras, pero sin dejar de lado que ha sido participe también de aventuras espaciales maravillosas: “Alien” y “Blade Runner” son sin lugar a dudas clásicos del género, y no quiero dejar de lado, la efectiva “Prometheus” que sin lograr puntos medios, es otro éxito del director Scott.
Matt Damon se pone en la piel de Mark Whitney como el olvidado astronauta que deberá poner a prueba sus dotes de botánico y así poder no morir en el intento. Con una gracia y talento, Damon sabe sacar lo mejor del personaje, teniendo así una de las mejores interpretaciones de su carrera.
Una estupenda (y sarcástica) banda sonora apoya esta aventura espacial, una mezcla de música disco y rock clásico, perfectamente elegidas para influenciar al público con las emociones creadas por su producción.
En cuanto los actores secundarios, me llama poderosamente la atención el personaje sobrio y directo creado por Jeff Daniels, como “Teddy Sanders”, director de NASA en esta película. Daniels es del tipo de actor que, sea cual sea el papel que elija, siempre resulta ser foco de atención en la misma. No quiero dejar de mencionar a la siempre excelente Jessica Chastain como la comandante Lewis, así también Chiwetel Ejiofor, Benedict Wong y un desconocido pero simpático Donald Glover, en el papel de Rich Purnell, un peculiar astrofísico.
“The Martian” es sin lugar a dudas una estupenda película hecha para la industria. Desde la historia hasta la presentación, muestra al Hollywood que hace falta, el Hollywood que entretiene al público con proyectos novedosos y divertidos, película que si dará que hablar en los próximos meses, y que pone en manifiesto estos pequeños “underdogs” como los es Andy Weir, los cuales el público adora.
Ya verán, la cantidad de premios y nominaciones en el renglón técnico que esta película tendrá, y con muy altas probabilidades de nominación para alguno de sus actores, director (Scott), Drew Goddard (Cloverfield, World War Z) como guionista y el veterano editor Pietro Scalia (Good Will Hunting, Kick Ass).