Uno de los temas que más me ha apasionado, sin ningún por qué en particular, son las historias o películas, para ser bien específico, acerca de cómo se planea un robo. Me ha parecido fascinante como desde el cine clásico (Rififi, Le Cercle Rouge) han utilizado tecnología de punta o los más interesantes trucos para efectuar dichos planes. No sé, llámenme ladrón frustrado, pero creo que se necesita cierta maldad e imaginación para crear algunos robos exitosos. La ventaja que tiene el cine es que, como es ficción, puedes crear lo que quieras y es válido ante los ojos de espectador. Habiendo dicho esto, la nueva película de Will Smith “Focus” es una de las peores que he visto.
“Focus” es más un romance de dos ladrones que una película en sí de robo. Al menos durante el primer acto de la película si podemos ver uno que otro truco muy bien coreografiado, pero luego de ahí, la película va cayendo en un aburrido y lento espiral que hace que cualquier espectador pierda el interés.
Aun con protagonistas tan atractivos para el público, la historia no logra atrapar, y peor aún, donde las buenas películas de robo tienen su clímax, el final, es realmente pobre, forzado y poco creíble.
Will Smith es Nicky, quien dirige una organización que planea robos a grandes escalas, pero no a empresas o bancos, sino a individuos, robándole sus objetos de valor y luego re-vendiéndolos. En una de esas conoce a Jess (Margot Robbie) y queda perdidamente enamorado (como si fuera algo difícil). Luego de ciertas circunstancias que lidiar, se separan, pero un tiempo más tarde, otro gran golpe los unirá.
Algo interesante de las películas de robo es la filosofía de los malhechores y cierto carisma que van desarrollando durante la trama. Glenn Ficara y John Requa (I love you Phillip Morris, Crazy stupid Love) presentan su película y guion más flojo como dúo de directores, película que al inicio resulta interesante pero que como intravenosa de miel de abeja, cae poco a poco. Pero en esta ocasión, la gota de miel no llega a su destino.
“Focus” es un resultado mediocre. Es el claro producto para recuperar una caída carrera de Will Smith y tratar de lanzar la de una bella y prometedora actriz, no mas, y si mucho menos.