Dicen que son una pura estafa, y que distraen al público de lo realmente importante. Es decir, del trabajo de dirección, del guión, de las interpretaciones de los actores y de todas esas cosas que sirven para ganar premios gordos. Pero no te engañes, los efectos especiales son un arte mayor. Lo bastante mayor, por lo menos, para que su elaboración detrás de las cámaras de lugar a imágenes tan interesantes (y, a veces, más) como las que aparecen en la pantalla. Por eso, hemos dedicado un nuevo informe con fotos behind the scenes (que es como llaman los entendidos a las instantáneas de rodaje) para enseñarte el trabajo que costó crear algunas de las escenas más espectaculares de la historia.
Raiders of The Lost Ark (1981)
¿A que impresiona la silueta de Indiana Jones en el Pozo de Almas, cuando rescata el Arca de la Alianza de los pérfidos nazis y de un montón de víboras? Pues aquí tienes su secreto: el místico artefacto no es más que un recortable de contrachapado, sostenido por dos extras. En el caso del señor a la derecha de la foto, podemos decir que el sombrero hace al hombre.
Alien (1979)
Te presentamos a Bolaji Badejo, el estudiante nigeriano de diseño gráfico al que Ridley Scott escogió para convertirse en la criatura de H. R. Giger. En honor a él, hay que decir que Badejo (quien nunca había hecho cine antes, y que nunca repitió después) se preparó intensivamente, estudiando expresión corporal y tai chi para participar en un filme en el cual nunca se le vio la cara.
Alien 3 (1992)
Si la anterior instantánea te mostraba al hombre bajo el disfraz, aquí tienes al hombre que creó a los bichos xenomorfos. Nada menos que H. R. Giger, veteranísimo artista suizo al que puedes ver dándole los últimos toques a su pequeñín antes de mandarlo al plató. Tras el rodaje de este filme, del cual reniegan él y David Fincher, Giger acabó en pleitos con la productora por quítame allá unos títulos de crédito (y una nominación al Oscar).
El imperio contraataca (1980)
Una entrega de Star Wars no podía faltar en este informe. Y, como la segunda parte de la trilogía original es la más imponente de todas, le dedicamos una doble ración. Aquí se demuestra que en el poderío del ejército de Darth Vader había mucho de fachada (y mucho trabajo del experto en stop motion Phil Tippet).
En cuanto a estas imágenes, dejan en evidencia a Luke Skywalker: tantas agonías a la hora de arrojarse al vacío de Ciudad Nube, y resulta que allá abajo no le esperaba un abismo gaseoso, sino un montón de mullidos colchones.
Cazafantasmas
Sigourney Weaver se había librado de las zarpas del monstruo en Alien, pero eso no le libró de caer en las del técnico Richard Edlund y su equipo. Señalemos que, en escenas como esta, Edlund (que fue nominado al Oscar) trabajó sobre los diseños de Berni Wrightson, un gigante del mundo del cómic.
En cuanto a estas fotos, nos muestran que el muñequito Stay Puft era más bien poca cosa visto de cerca. Ahora bien, cuando alguien os pregunte si sois dioses, seguimos recomendándoos que respondáis "sí".
Scanners (1981)
Como no podía ser de otra manera, la foto más sangrienta de este informe corresponde a una película deDavid Cronenberg. Así se vio desde las bambalinas la mítica secuencia de la cabeza explosiva, tras de la cual (suponemos) más de un miembro del equipo debió ir corriendo a cambiarse de ropa.
James Bond contra Goldfinger (1964)
No todos los efectos especiales incluyen vísceras, sangre artificial y criaturas de plasticorro. Aquí, sin ir más lejos, todo es carne de la buena, como corresponde al maquillaje más mítico que ha aparecido en la saga de 007. Ojito a la cara de picarón de Sean Connery.
Titanic (1997)
Puede que James Cameron tenga bien ganada su reputación de bestia, pero ni siquiera él se atrevió a sumergir a Leonardo DiCaprio y Kate Winslet en las aguas del Atlántico Norte. Ahora bien: por más que la secuencia más trágica de su blockbuster romántico se rodase en una piscina de plástico, el agua estaba realmente helada, y la actriz británica pasó las de Caín por culpa de las bajas temperaturas.
Terminator 2 (1991)
Tanto poderío digital, tantos trucajes visuales de última generación... Y, en este filme, Cameron siguió necesitando de las ayudas de Stan Winston, seguramente el creador de efectos especiales físicos más influyente de la historia. Aquí podemos ver a su equipo llenando a Robert Patrick de balazos de cristal líquido. "No sé por qué se toman tanta molestia, si 'Arnie' me va a apalear de todas formas", parece pensar el actor.
Avatar (2009)
La carrera de James Cameron es como una historia (resumida) de los efectos especiales modernos, así que también hacemos parada en su epopeya digital-ecologista. Como podrás observar, no bastó con coronar a Zoë Saldana con un capturador de movimiento, ni en llenarle la cara de puntitos azul Na'vi, sino que tampoco faltaron unas orejas puntiagudas de plástico.
El Señor de los anillos: la comunidad del anillo (2001)
Insistimos: por mucho que los directores de hoy en día se empeñen en hacerlo todo por computadora, hay trucos que jamás pasarán de moda. La técnica de emplear a dobles de estaturas diferentes para producir una ilusión de tamaño, que vemos aquí aplicada a Ian McKellen por Peter Jackson y sus chicos de WETA,fue empleada por Billy Wilder en El apartamento, sin ir más lejos.
Japón bajo el terror del monstruo (1954)
Y es que, cuando se trata de traumatizar a una generación entera, a veces basta con lo más básico. Por ejemplo, nuestro lagarto japonés destructor de ciudades favorito era, en el momento de su debut, un traje de goma con un señor nipón dentro. ¿Logró Roland Emmerich impactarnos tanto en su remake de 1998? Creemos que no.
Gremlins (1984)
Bien en la pantalla, bien en una foto de rodaje, bien en movimiento o en su estado original de marioneta,Gizmo sigue siendo el pequeño mogwai más adorable de la historia del cine. Observa los guantes de peluche empleados por el marionetista.
Mad Max 2 (1981)
Emil Minty, el actor que encarnó al niño salvaje en la segunda aventura motorizada de Mel Gibson, publicó en internet estas espléndidas fotos de la persecución final. La primera, en blanco y negro, prueba que rodar la escena en la que uno de los bikers psicópatas se lanza a por el camión de gasolina requirió del uso de maniquíes. En la segunda, ya en color, comprobamos que el director George Miller siempre fue un buen amigo de los niños: no nos extraña que acabase dirigiendo Happy Feet.
Parque Jurásico (1993)
Una vez más, comprobamos que el genio de Stan Winston (sí, los efectos de esta película también fueron suyos) nunca le tuvo miedo a los píxeles. Porque, llegado el momento de escenificar el ataque del tiranosaurio rex, ninguna imagen digital puede compararse a unas marionetas y unos animatronicsgigantes.
Teen Wolf 2 (1987)
Como puede verse aquí, al pobre Jason Bateman no le tocó sólo aguantar muchas comparaciones poco elogiosas con Michael J. Fox en esta secuela, sino también someterse a unas sesiones de maquillaje maratonianas. El detalle de que el actor almorzase mientras le llenaban la cara de pelos licántropos nos da un poco de grima, y todo.
Inception (2010)
¿Están bailando ska 'Leo' DiCaprio y Ellen Page? Pues no: están sufriendo en sus carnes los trucos empleados por Christopher Nolan y Chris Cornbould (su técnico de efectos especiales de cabecera) para convencernos de que un París onírico se dobla sobre sí mismo. Si sólo mirar esta foto nos da mareo, no queremos ni pensar cómo acabaría Joseph Gordon-Levitt tras la pelea en el hotel giratorio.
