Película Los Minions, 2015
Si, es cierto, los Minions han sido muy graciosos desde su primera aparición en “Despicable Me” (2010). Esos pequeños seres amarillos que le hacen compañía a Gru, sin lugar a dudas fueron 
la gran revelación y lo mejor en ambas películas de nuestro querido villano, y como cierta premonición, imaginé que un futuro no muy lejano el mismo estudio explotaría esa popularidad. Pues bien, por desgracia esa premonición se hizo cierta y en este 2015 estamos viendo el primer largometraje en específico de ellos. “Minions” esta arrasando en los cines del mundo, desafortunadamente.
Siendo honesto, tenía muchas expectativas con esta película solo de Minions, pues yo como la mayoría de ustedes caí rendido ante sus encantos disléxicos. Caí también por esas situaciones cómicas en las que siempre se vieron envueltos, lo confieso, pero todo ese encanto vino de la mano con un propósito, el de ser secundarios a un maestro. Ellos quedan relegados a momentos graciosos creados específicamente para el personaje principal, es decir, Gru. Junto a Gru, hacían la química adecuada para que la ecuación tuviera sentido. Ahí radica el desencanto, no hay ningún norte en “Minions”.
Historia y crítica película Los Minions
La película narra las vicisitudes de dichos seres amarillos a través de la historia: cómo fueron creados y cómo van desarrollando cierta necesidad de tener un maestro a quien servir. Verlos fracasando a través de los siglos, hace que llegue un momento en que las mismas secuencias de cómo van perdiendo jefes, cansan. Luego de esconderse por años, tres de ellos se enfrascan en una misión: buscar un nuevo jefe sea donde sea. Así es que Bob, Kevin y Stuart salen en busca de este. Por situaciones más que inexplicables, van a dar con Scarlett Overkill (Sandra Bullock) y Herb Overkill (Jon Hamm), ella la mejor supe villana del mundo, y el su esposo. Scarlett tiene como norte robar la corona de la reina Elizabeth, y cuenta con la ayuda de nuestros amigos amarillos, algo que podría complicarle el plan.
Los motivos y las situaciones en que el escritor Bryan Lynch va colocando a los Minions pasan de mediocres a ridículas, es casi como escribir dicho guion “por salir del paso”. Ya el éxito estaba asegurado desde la primera promoción, todo el mundo iba a ver esta película, no importa que historia contaras, así que ¿para qué preocuparse por escribir algo con calidad? Y no es llegar a las exigencias de un guión perfecto, pero si tomamos como muestras las entregas anteriores, donde las historias tenían coherencia, personajes interesantes y graciosos y una que otra buena musicalización, el resultado, por seguro, sería otro.
“Minions” si sacará carcajadas, no digo que no, pero es un resultado mediocre en el inmenso mar de secuelas, pre-cuelas y reboots que estamos presenciando. La caterva de tonterías apenas inicia, así como las situaciones de los Minions, de mal a peor.
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